Casa d-3, parte 1, es la primera de un conjunto de viviendas que se han diseñado para construir en este solar localizado en el residencial Villa Real, al Oeste de San José. El terreno, de topografía accidentada, ofrece amplias visuales hacia el Noroeste como también hacia la privilegiada vegetación que se mantiene en el residencial y que rodea el solar. Este entorno de cualidades naturales está simbolizado en el terreno por tres grandes árboles de Guanacaste que logran darle al espacio una sensación de recogimiento al mismo tiempo que de apertura; e introducen una confrontación, algo efímero, una fragilidad con cierta pretención de duración.
“El papel que la naturaleza puede desempeñar como posible modelo para la arquitectura es una cuestión antigua y recurrente en la historia de la arquitectura” 1 Nuestro interés al abordar los proyectos ha estado en buscar una nueva formulación sin crear un simulacro vacío, o una imitación superficial de las formas naturales, sino tratando de establecer su geometría oculta, de penetrar en el espíritu que hay tras ella. La complejidad de la experiencia contemporánea se presenta como fragmentos dispares y realidades contradictorias.
“Todo lo que ocurre en la naturaleza es fruto del azar y de la necesidad” 2
Naturaleza-Abstracción. La arquitectura encarna fuerzas naturales como la luz y el viento. Por medio de la abstracción reacciona ante ellas destilando ideas y acentuando sensaciones del mundo natural. “La abstracción es un modo de llegar simultáneamente a la mente y a los sentidos”. 3 La intención no es lograr únicamente espacios confortables o adaptados al clima, sino que encarnen y representen esas fuerzas ocultas y variables.